Leyenda de la Virgen de la Encina

La leyenda de la Virgen de la Encina relaciona esta talla con los caballeros templarios. Pero conozcamos un poco más sobre esta escultura antes de pasar a su hallazgo.

Patrona del Bierzo

La Virgen de la Encina es conocida también como la Morenica debido al color de la talla. Es la patrona de Ponferrada y de la comarca del Bierzo. En su honor se celebra cada año, el 8 y 9 de septiembre, las fiestas de la Encina. Este evento festivo pone el broche final al verano y sirve de transición al comienzo de curso escolar y la normalidad laboral.

La Virgen de la Encina fue coronada patrona de todo el Bierzo el 8 de septiembre de 1908.

Virgen negra

La Morenica es una de las pocas vírgenes negras que existen. De ahí su mayor importancia y atracción. Es una imagen de estilo bizantino que representa a la Madre y el Niño.

Según la leyenda…

El obispo de Astorga, Santo Toribio, fue el responsable de traer esta Virgen desde Tierra Santa, Jerusalén, hasta la comarca del Bierzo en el siglo V. Sería en el siglo IX cuando el monje San Genadio tomaría la decisión de esconderla para protegerla de la presencia de los musulmanes.

Cuenta la leyenda que la Virgen de la Encina permaneció varios siglos oculta hasta que, por azar o casualidad, por el año 1300 los templarios la rescatarían del interior del tronco de una encina. Las obras en el Castillo requerían de grandes cantidades de madera y un ocho de septiembre, al cortar un encina, ésta se partió dejando a la vista un nicho con la imagen de la Virgen. Al no conocer su nombre y en alusión a su descubrimiento, pasó a llamarse Virgen de la Encina.

Leyenda o realidad, o partes medias, lo cierto es que la talla actual no es a la que se refiere la tradición. La Virgen de la Encina que preside la Basílica que lleva su nombre es del siglo XVI y está realizada en madera plateada.