Es conocido como el primer Conde de Lemos a Don Pedro Álvarez Osorio. Descendiente de terratenientes, está considerado como uno de los señores más importantes del Bierzo durante el siglo XV.
Su abuelo poseía las tierras de La Cabrera y la Ribera con los castillos de Peñarramiro, Peñavelosa, Lucio y Cornatel. Mientras su abuela tenía la tierra de Balboa con su fortaleza y Corullón.
A principios del siglo XIV, tras la disolución de la Orden del Temple, varios señores se hacen cargo del Castillo de los Templarios, siendo uno de ellos el Duque de Arjona. Este dejará su huella con la construcción, durante la segunda mitad del siglo XIV, de la torre que lleva su nombre. De planta semicircular y con tres niveles, limita con la ronda del Sil del Castillo.
Hermana y heredera del duque de Arjona era Beatriz de Castro, con quien se casaría en 1432 Pedro Álvarez Osorio. De este matrimonio nace uno de los señoríos más importantes de la época y Pedro Álvarez Osorio se convierte en el principal noble de Galicia y el Bierzo. Pedro y Beatriz comienzan la labor de recuperar los bienes del duque de Arjona, parte en donación y parte por compra. De esta forma se hacen con las propiedades de Monforte de Lemos, Castro Caldelas, Villafranca, Sarria y Ponferrada.
Llegado 1453 el matrimonio ya había recuperado la totalidad de los bienes gallegos y bercianos del duque de Arjona, a excepción del condado de Trastámara.
No deja de sorprender la figura de este noble estratega. Pedro Álvarez Osorio fue un hombre cultivado, que cursó estudios de gramática y humanidades en la Universidad de Salamanca. Aficionado a la lírica llegó incluso a componer algunas piezas.
De su matrimonio con Beatriz de Castro nacería Alonso Osorio, que moriría pocos años más tarde que su madre, con tan solo 25 años. Antes de su muerte Alonso reconoce como legítimo heredero a su hijo Rodrigo.
Tras la muerte de Beatriz en 1455, el primer Conde de Lemos se casaría con María Bazán. De este matrimonio nacerían cuatro hijas. Al emparentar su primogénita con el hijo de su mayor enemigo, el Conde Benavente, el Conde de Lemos reconoce el testamento de su hijo fallecido Alonso y declara heredero legítimo a su nieto Rodrigo. Como forma de rubricar su legado, el Conde de Lemos otorga a Rodrigo el distintivo de la Tau que aparece labrado en diferentes partes del Castillo de los Templarios.
El primer Conde de Lemos moriría en su castillo de Cornatel en 1482.
Foto: Escudos de Pedro Álvarez Osorio y Beatriz de Castro ubicado en el Cubo Nuevo del Castillo de los Templarios
Bibliografía / Cobos Guerra, F. y Castro Fernando, J.J. de – Castillo de Ponferrada (2002)